Descubren un posible mecanismo biológico que conecta el cáncer de mama y la diabetes

Un estudio ha revelado el mecanismo por el que el cáncer de mama suprime la producción de insulina, perjudicando la regulación del azúcar en sangre y provocando diabetes, lo que, a su vez, favorece el crecimiento del tumor.
El cáncer de mama y la diabetes de tipo 2 parecen ser enfermedades claramente diferentes, con un punto en común únicamente. Sin embargo, investigaciones anteriores han descubierto asociaciones entre ambas enfermedades. Las mujeres con diabetes, por ejemplo, tienen entre un 20 y un 27 por ciento más de riesgo de desarrollar cáncer de mama.
La resistencia a la insulina -una característica clave de la diabetes- se ha asociado a la incidencia del cáncer de mama y a la escasa supervivencia. Los estudios de población sugieren que el riesgo de diabetes empieza a aumentar dos años después del diagnóstico de cáncer de mama y que, a los 10 años del diagnóstico, el riesgo es un 20% mayor en las supervivientes de cáncer de mama que en las mujeres de la misma edad sin cáncer de mama.
Este nuevo estudio, dirigido por científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego, describe un posible mecanismo biológico que conecta ambas enfermedades, en el que el cáncer de mama suprime la producción de insulina, lo que da lugar a la diabetes, y el deterioro del control del azúcar en la sangre promueve el crecimiento del tumor.
Según los investigadores, el culpable son las vesículas extracelulares (VE), esferas huecas secretadas o desprendidas por las células que transportan ADN, ARN, proteínas, grasas y otros materiales entre las células, una especie de sistema de comunicación de carga.
Se descubrió que las células cancerosas secretaban microARN-122 en las vesículas, que cuando llegan al páncreas, pueden entrar en las células de los islotes responsables de la producción de insulina, dispensar su carga de miR-122 y dañar la función crítica de los islotes para mantener un nivel normal de glucosa en sangre. Las células cancerosas utilizan más glucosa que las células sanas para alimentar el crecimiento del tumor.
La investigación se llevó a cabo utilizando modelos de ratón, en los que se descubrió que los gránulos de insulina de liberación lenta o un fármaco reductor de la glucosa conocido como inhibidor de SGLT2 restablecían el control normal de la glucosa en presencia de un tumor de mama, lo que a su vez suprimía el crecimiento del tumor.
Estos hallazgos respaldan la necesidad de una mayor detección y prevención de la diabetes entre las pacientes y supervivientes de cáncer de mama.