La ausencia de especialistas en endometriosis retrasa el diagnóstico de la enfermedad más de siete años

Según la Asociación De Afectadas por la Endometriosis (ADAEC), más de dos millones de niñas y mujeres sufren esta dolencia en España, y sin embargo escasean las unidades médicas especializadas y la ayuda institucional. Expertas y afectadas atribuyen el calvario que pasan al retraso en el diagnóstico. Se tarda unos siete años en diagnosticar esta enfermedad, aunque para algunas afectadas pueden pasar incluso décadas. Según las expertas, con un diagnóstico precoz se ahorraría dolor a muchas mujeres, pero la ausencia de especialistas, de centros especializados y de fondos para su investigación hacen el camino más difícil.
Son luchadoras contra el dolor. Los cálculos conservadores hablan de que una de cada 10 mujeres entre 15 y 49 años padecen endometriosis, es decir, un 10 por ciento. Según la ADAEC, hay entre dos y dos millones y medio de niñas y mujeres con esta dolencia en España. Francisco Carmona, jefe de ginecología del Clinic de Barcelona, dice que entre 10 y 15 por ciento de las enfermas tienen dolores muy agudos: “Es una enfermedad que invalida de una forma tremenda”, destaca. En menos de la mitad de los casos hay que operar para retirar el tejido que ha crecido y en torno al 40% de las mujeres con endometriosis quedan estériles.
Carme Valls-Llobet, endocrinóloga que desde hace 20 años dirige el programa Mujer, Salud y Calidad de Vida en el Centro de Análisis y Programas Sanitarios, asegura que la investigación de las causas se ha quedado a medio camino. “Sus causas no son sólo genéticas, también interviene la contaminación ambiental, en especial las dioxinas de las incineradoras, y el estrés físico y psicológico que altera el nivel de estrógenos, es decir, las condiciones de trabajo extenuantes, los cambios de horario. No seguimos el ritmo del día sino el que nos marca el trabajo”, detalla.
La detección temprana es clave para enfrentar la endometriosis. Por eso, ADAEC está desarrollando campañas informativas en colegios e institutos. En esta asociación luchan para que la sanidad pública les ofrezca soluciones y proporcionan información y asesoramiento a las pacientes sobre nutrición, fertilidad y otras cuestiones. María Ángeles Poveda, presidenta de la ADAEC, cuenta que también tratan de “facilitar la recuperación física de las pacientes mediante convenios de colaboración y grupos de apoyo psicológico, algo fundamental para ellas”.
La presidenta de la ADAEC explica que la incomprensión por parte de amigos, pareja y familia “duele mucho“: “Se nos puede llegar a tratar como enfermas mentales porque te merma a todos los niveles. Dejas de salir, de hacer planes… y no todo el mundo lo comprende. Nos tachan de histéricas o enfermas”. Las entrevistadas por Cimac Noticias denuncian la ausencia de ayuda institucional. Hay muy pocas comunidades que cuenten con unidades para tratar la endometriosis: Madrid, Barcelona, Córdoba, Bilbao, Málaga y Valencia son las únicas ciudades con equipos específicos según ADAEC. La asociación demanda formar a equipos sanitarios; que existan unidades de referencia en todas las comunidades, con equipos multidisciplinares, y que al menos un hospital recoja los casos a nivel nacional para hacer frente a la enfermedad.
La doctora Valls-Llobet subraya la importancia de “conocer el origen del problema” para adaptar las terapias. Por ejemplo, ha presenciado que estudiantes del MIR han desarrollado la enfermedad durante ese periodo, lo que puede indicar que los cambios de turno propician cambios hormonales. Retirar la regla “no es la solución”, y “no parece que los tratamientos basados en anticonceptivos estén funcionando bien”, añade. En cambio, confía en los beneficios de una alimentación “ecológica, natural, libre de parabenos y hormonas”.
- Fuente: Cimac Noticias
- Foto: Britt-knee