Relación entre el síndrome de ovario poliquístico y el trastorno bipolar

El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es una enfermedad sobre la cada vez se tiene más consciencia. Entre un 5 y un 10% de las mujeres son diagnosticadas con ella. Se caracteriza principalmente por un desequilibrio hormonal, específicamente relacionado con un alto nivel de andrógenos, una hormona que suele estar más presente en los hombres que en las mujeres. Los altos niveles de andrógenos liberados por los ovarios pueden causar numerosos quistes, ciclos menstruales irregulares y problemas con la liberación de óvulos lo que provoca infertilidad.
Además de las afectaciones en los órganos reproductivos, los síntomas del SOP pueden incluir crecimiento excesivo de vello, acné, aumento de peso,pérdida de cabello, apnea del sueño, ansiedad y depresión. De hecho los problemas psicológicos son un factor importante en el SOP y casi un 60% de las personas con síndrome de ovario poliquístico tiene algún tipo de trastorno en la salud mental.
Múltiples estudios han demostrado un vínculo entre el SOP y el ácido valproico / valproato. El valproato es un anticonvulsivo utilizado para tratar el trastorno bipolar como un estabilizador del ánimo. También se utiliza para tratar la epilepsia. Un estudio mostró que el 43% de las mujeres que reciben valproato para la epilepsia tenía síndrome de ovario poliquístico. Eso es más de cuatro veces la tasa de promedio. En el trastorno bipolar, un estudio encontró que el 47% de los pacientes que toman valproato tuvo SOP en comparación con el 13% de los pacientes que no lo tomaban.
Pero el enlace entre ambas enfermedades no se detiene ahí. Las mujeres con trastorno bipolar tienen casi el doble de probabilidades de tener ciclos menstruales irregulares que las mujeres que no padecen la enfermedad. Si bien los medicamentos pueden causar irregularidades, los períodos irregulares se producen antes de que las pacientes estén diagnosticadas con trastorno bipolar y por tanto sean tratadas. También existe similitud en la prevalencia de los trastornos metabólicos. Los pacientes con trastorno bipolar tienen el doble de probabilidades de tener síndrome metabólico que los que no lo tienen, al igual que las mujeres con SOP, cuya tasa de sufrir síndrome metabólico es alrededor del 50%.
Tanto el SOP como el trastorno bipolar aumenta los niveles de estrés y por tanto de cortisol. Esto podría ser debido a una disfunción en lo que se llama el eje hipotálamo-pituitario-adrenal(HPA). El eje HPA es responsable de la respuesta al estrés y el cortisol es liberado precisamente para manejar el estrés. El cuerpo se debería calmar cuando el factor estresante ya no existe pero en ocasiones hay problemas con este ciclo, lo que ocurre tanto en pacientes con trastorno bipolar como en mujeres con síndrome de ovario poliquístico. Los niveles altos de cortisol conducen a muchos problemas cognitivos y síntomas depresivos y este desequilibrio hormonal también podría ser lo que conduce a hiperandrogenismo (excesiva secreción de andrógenos,) en el SOP.
¿Cuál es la relación por tanto causa-efecto entre ambas enfermedades? De momento no hay evidencia concluyentes. Simplemente tienen similitudes significativas que deben ser estudiadas en profundidad. El verdadero problema es que ambos trastornos necesitan ser tratados pero no de forma individual porque los tratamientos pueden condicionar efectos en el otro trastorno.
- Fuente: Psych Central
- Foto: Nicola Jones