La exposición a químicos tóxicos avanza el inicio de la menopausia entre dos y cuatro años

El mejor consejo que se puede dar en el Día Mundial de la Menopausia para retrasarla podría ser alejarse de ciertas sustancias químicas tóxicas, de acuerdo a un estudio publicado a principios de año en PLoS ONe, que vio cómo las mujeres que tienen en su organismo altos niveles de sustancias químicas presentes, por ejemplo, en plásticos, productos de cuidado personal y artículos para el hogar pueden tener la menopausia entre dos a cuatro años antes que aquellas menos expuestas a estos compuestos químicos.
Los investigadores de Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis analizaron los niveles en la sangre y en la orina de 111 productos químicos que se sospecha interfieren en la producción natural y la distribución de las hormonas en el cuerpo. A pesar de que previamente algunos pequeños estudios habían examinado la relación entre los productos químicos y la menopausia de alteración endocrina, esta investigación es la primera en explorar en profundidad el vínculo entre la menopausia y los productos químicos individuales, además de haber analizado una muestra nacional representativa de pacientes en todo el Reino Unido en 31.575 personas.
«Las conclusiones de nuestro trabajo son claras», afirma Amber Cooper, autora del estudio: «algunos productos químicos están vinculados a un inicio precoz de menopausia y pueden conducir a una disminución de la función ovárica». Como recuerda la investigadora una disminución en la función ovárica no sólo puede afectar negativamente a la fertilidad, sino también puede conducir a un desarrollo temprano de enfermedades cardiovasculares, osteoporosis y otros problemas de salud. A la exposición de las sustancias químicas se han relacionado ciertos tipos de cáncer, al síndrome metabólico y, en mujeres más jóvenes, a la pubertad precoz. También la exposición prenatal a estos químicos tóxicos se ha asociado muy recientemente a graves problemas de salud.
La mala noticia que es muchas de estas exposiciones químicas están fuera de nuestro control, dice la experta, ya que forman parte de nuestra vida: contaminante en el suelo, agua y aire. Pero la buena es que hay otros productos contra los que sí podemos luchar: «podemos ser más conscientes de los plásticos y otros productos que usamos en nuestro hogar o para nuestro uso personal». Cooper recomienda que empleemos envases de vidrio o de papel en lugar de plástico para calentar los alimentos en el microondas o que profundicemos sobre lo que contienen algunos productos cosméticos, para el cuidado personal y el envasado de los alimentos que usamos todos los días.
Los investigadores identificaron 15 sustancias químicas que requieren una evaluación más profunda porque estaban significativamente asociadas con la menopausia precoz y potencialmente podría tener efectos perjudiciales sobre la función ovárica. «Una menopausia precoz puede alterar la calidad de vida de una mujer y tiene profundas implicaciones para la fertilidad, la salud y nuestra sociedad», afirma.
- Fuente: ABC
- Foto: Agencia de Noticias ANDES