Se detecta un mayor riesgo de infarto en mujeres con trastorno de sueño

Una nueva investigación ha demostrado que las personas que padecen insomnio tienen un 69 % más de probabilidades de sufrir un infarto en comparación con aquellas personas que no sufren este trastorno del sueño. Los investigadores descubrieron, además, que dormir cinco o menos horas por noche aumenta el riesgo de sufrir un infarto de miocardio, afectando con más frecuencia a las mujeres.
A través de este estudio el equipo de investigadores espera poner el relieve la importancia que tienes los trastornos del sueño en la salud cardiaca, siendo el insomnio el causante de problemas para conciliar el sueño, permanecer dormido o conseguir un sueño de calidad.
Para la realización de esta investigación se revisaron 1126 estudios, de los cuales se seleccionaron 9, evaluando los datos de un total de 1.184.256 adultos (de los cuales un 43% eran mujeres). Un 96% no tenía antecedentes de infarto de miocardio y un 13% de los perfiles padecía insomnio (dificultad para conciliar el sueño, dificultad para permanecer dormido y no poder volver a dormirse). A partir de los datos agrupados se observó una asociación entre el insomnio y el infarto de miocardio tras controlar ciertos factores influyentes, tales como la edad, el sexo, tabaquismo y comorbilidades.
Basado en los resultados, el equipo de investigadores determinó la importancia de dar prioridad al sueño, durmiendo entre siete y ocho horas diarias.
¿Por qué las mujeres sufren más de insomnio?
Hay estudio que han determinado que del 20,8% de la población que presenta al menos un síntoma de insomnio un mínimo de tres noches por semana, la prevalencia es mayor en mujeres (23%) que en hombres (17,6%), siendo además un trastorno que se intensifica con la edad.
Dada la homogeneidad en los resultados de diversas investigaciones, todo señala a unas mismas causas: los cambios hormonales y las fluctuaciones de estrógeno y progesterona (los cuales repercuten negativamente en una correcta higiene del sueño) y el ciclo menstrual, también asociado con cambios en los ritmos circadianos. Según los estudios, durante la semana previa a la menstruación los problemas de sueño se incrementan en comparación con otros periodos del ciclo. Las dificultades para descansar se agravan en el embarazo.