Tener un parto prematuro podría aumentar el riesgo de sufrir TDAH

Cuanto más prematuro es un niño al nacer, más altas son las probabilidades de un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), según un nuevo estudio finlandés. Los bebés nacidos con un peso particularmente bajo o alto para su edad gestacional también tienen un riesgo más alto de TDAH, encontraron los investigadores. «Aunque el TDAH es más común en los bebés que tienen peso bajo o sobrepeso, los mayores riesgos los tienen los bebés con el grado más grave de mal crecimiento en el útero», dijo el Dr. Andrew Adesman, jefe de pediatría del desarrollo y conductual del Centro Médico Pediátrico Cohen de Nueva York.
«La realidad es que el riesgo adicional de TDAH es relativamente bajo para los bebés nacidos cerca de su fecha estimada de parto, pero es significativamente mayor para los bebés nacidos siete o más semanas antes de lo previsto», comentó Adesman, que no participó en el estudio. Esos hallazgos podrían implicar que las vías del cerebro fetal podrían desarrollarse de forma distinta en los niños que no reciben una nutrición adecuada, o que se nutren en exceso, en el útero, o cuando un niño nace prematuramente.
Los investigadores finlandeses dirigidos por la Dra. Minna Sucksdorff de la Universidad de Turku compararon a más de 10,000 niños con TDAH con más de 38,000 niños sin TDAH que eran similares respecto al sexo y a la fecha y el lugar de nacimiento. Para ello utilizaron los expedientes médicos del nacimiento para ver cuánto había durado el embarazo de la madre cuando nació el niño. También observaron si los niños tenían un peso bajo o sobrepeso respecto a lo anticipado a esa edad gestacional. Los síntomas de este trastorno cerebral común incluyen falta de atención, conducta impulsiva e hiperactividad, que pueden afectar la capacidad de aprender y de entablar amistades de un niño.
Los resultados del estudio publicados en la revista Pediatrics, mostraron que el riesgo de TDAH aumentó por cada semana de prematuridad con que nació el niño. Los niños con TDAH también tenían 10 veces más probabilidades de haber nacido a las 23 o 24 semanas de embarazo que los niños sin TDAH. Y los niños con TDAH tenían al menos el doble de probabilidades de haber nacido entre las 27 y las 33 semanas, en comparación con los que no tenían TDAH. Ese hallazgo permaneció a pesar de que los investigadores tomaran en cuenta otros factores que afectan a la edad gestacional y al riesgo de TDAH, como la edad de la madre y si fumaba o consumía drogas o alcohol.
En términos del peso al nacer, los investigadores también encontraron un riesgo más alto de TDAH en los niños con los porcentajes de peso más altos y más bajos. «Un mal crecimiento fetal es resultado de muchos factores, desde la genética hasta el ambiente», asegura el Dr. Glen Elliott, psiquiatra jefe y director médico del Consejo de Salud Pediátrica en Palo Alto, California. «No es sorprendente que un feto que crezca menos vigorosamente de lo usual pueda tener efectos sobre el desarrollo del cerebro. Más sorprendente es la sugerencia de que crecer de forma demasiado vigorosa se asocie con un mayor riesgo de ser diagnosticado con TDAH luego. En los nacimientos bastante prematuros, el riesgo asociado de TDAH aumenta de forma dramática», concluye Elliott.
- Fuente: Medline Plus
- Foto: Anyul Rivas